miércoles, 18 de marzo de 2009

Nuevas aventuras en la Windy City

Tras un tiempo de descanso, aquí estoy de vuelta para contar mis aventuras y desventuras por estas tierras lejanas...

El 17 de marzo, en Chicago como en muchas otras ciudades, se celebra el Día de San Patricio. En realidad, se trata del Patrón de Irlanda, pero dado que muchos americanos tienen orígenes irlandeses, en muchos lugares de Estados Unidos se celebra como si fuera propio. Y claro está, uno de esos lugares afortunados es Chicago.

Desde hace unos años se celebra un desfile por las calles de la ciudad el sábado anterior. Toda la gente vestida con camisetas verdes, perros pintados de verde, etc. Hasta ahí todo relativamente normal. Lo realmente peculiar de Chicago y lo que lo hace diferente es que todos los años 'pintan' el río de verde. No sé si es algo muy ecológico, pero la cuestión es que a las 10.45 un par de barcas pasan por un tramo del río echando unos polvos que, milagrosamente, transforman el agua en verde. Es algo digno de ver.

El sábado fue un día intenso. Empezamos viendo la transformación del río, después el desfile, para acabar en una fiesta del Departamento de Policía a la que nos invitó un amigo. Ya os podéis imaginar a los polícias uniformados, una cerveza tras otra, ... Ver para creer.

Y el martes, el auténtico St. Patrick Day. Para festejarlo, qué mejor que ir a ver un Chicago Bulls - Boston Celtics de la NBA. Para quien no lo sepa, Boston es la ciudad de los irlandeses por excelencia (por ello lo de celtics). El color de la camiseta es verde, con un trébol y tal. Pues bien, los Bulls, que normalmente visten de rojo, jugaron con uniforme verde, con lo que los Celtics tuvieron que jugar con la segunda equipación. En fin, un poco de psicología nunca viene mal. Y la fórmula funcionó. Ganaron los Bulls contra todo pronóstico 127-121, en un PARTIDAZO en mayúsculas y con todas las letras. De lo mejorcito del año, la verdad. Casi acabamos haciendo la ola.

Y poco más. El buen tiempo parece que empieza a acercarse a Chicago. El fin de semana tuvimos temperaturas de 10 y 15 grados, y ayer martes llegamos casi a los 20, una locura. La gente casi iba en bañador por la calle. El domingo me di cuenta que yo también estoy un poco 'americanizado'. Hacía un día muy bueno, el solecito entraba por la ventana de mi piso, y apetecía hacer un poco de deporte. Así que, ni corto ni perezoso, me puse los pantalones cortos y la camiseta y salí a la calle a correr por el lago. Bufff, qué frío. Hasta que entré en calor, me estuve preguntando porqué no cogí la sudadera, o me puse los pantalones largos, como las personas normales. Pero bueno, al final valió la pena. Un poco de color nunca viene mal.

Dejo algunas fotos del proceso de transformación del río y del desfile. Entre ellas y para que la gente se haga una idea de la obsesión por el verde en este día, una foto de un tipo con la barba verde...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

sergio,me ha paregut,molt diferent a atres festes,per lo que tu contes,pa tu seria molt atractriu,y aixo que dius que estas americanizante,chens de gracia no te acostumbres masa.

la mum

Anónimo dijo...

SERGIO:eres un autentic figura,me

tens enganchat totalment, tots els

dies entre en el blogt pensant que

quin sera el tema,continua axi i

esperem pronte noves aventures

JRGB

Anónimo dijo...

estas pasanteu de lujo, m,alegre primo

Anónimo dijo...

Prim,desde que està Patry ahi, no li fas cas al blog,el tens abandonat,bandido.

 

Free Blog Counter